En el mundo de la construcción y la arquitectura, la elección del vidrio correcto es una
decisión crucial. Con tantas opciones disponibles, es común preguntarse: “¿Cuál es la
diferencia entre vidrio templado y vidrio laminado?”.
Aunque ambos son considerados vidrios de seguridad, su composición y su reacción a la
rotura son completamente distintas. Entender estas diferencias es vital para garantizar que
tu proyecto tenga el vidrio ideal, ya sea para una fachada, una puerta o un tragaluz.
Aquí en Temperbraz, te guiamos para que tomes la mejor decisión para tu obra.
Vidrio Laminado: El Vidrio que se Mantiene Unido
El vidrio laminado está compuesto por dos o más hojas de vidrio unidas por una capa
intermedia de material plástico, como el PVB (polivinil butiral) o el EVA (acetato de etilvinilo).
Esta lámina adhesiva es el secreto de su seguridad.
- El Secreto de su Seguridad: En caso de rotura, los fragmentos del vidrio se
adhieren firmemente a la capa intermedia, evitando que caigan y causen daños. El
panel se “fisura” como una telaraña, pero permanece en su lugar. - Control de Ruido: La lámina interna también actúa como una excelente barrera
acústica, reduciendo significativamente el ruido exterior. - Protección UV: La capa de PVB o EVA bloquea hasta el 99% de la radiación
ultravioleta, protegiendo los interiores del desgaste.
Vidrio Templado: El Vidrio 5 Veces Más Fuerte
El vidrio templado, como ya explicamos en nuestro post anterior, es un vidrio que ha sido
sometido a un proceso de tratamiento térmico. Este proceso le confiere una resistencia
superior, haciéndolo hasta cinco veces más fuerte que un vidrio crudo.
- El Secreto de su Seguridad: Si el vidrio templado se rompe, se fragmenta por
completo en pequeños trozos romos (no cortantes), lo que minimiza el riesgo de
lesiones graves. - Resistencia a Temperaturas Extremas: Es ideal para áreas con grandes
variaciones de temperatura, como fachadas expuestas al sol o alrededor de fuentes
de calor.
Entonces, ¿Cuál Elegir? Usos Clave para Cada Uno
La elección entre el vidrio laminado y el vidrio templado depende del objetivo principal de tu
proyecto.
Elige Vidrio Laminado si necesitas:
- Protección ante Caídas: Si el vidrio está en una altura considerable (ej.
balcones, tragaluces), su capacidad para mantenerse unido evita el
desprendimiento de fragmentos. - Seguridad Antirrobo: Es más difícil de penetrar que el vidrio templado, ideal
para escaparates y vitrinas. - Aislamiento Acústico: La opción perfecta para estudios de grabación,
edificios en zonas urbanas ruidosas u oficinas. - Vidrio para Fachadas: En fachadas de edificios, el vidrio laminado ofrece
una capa extra de seguridad.
Elige Vidrio Templado si necesitas:
- Máxima Resistencia a Impactos: Perfecto para puertas de ducha, ventanas
residenciales y barandillas donde la resistencia a golpes es la prioridad. - Seguridad en Rotura: La mejor opción para evitar cortes graves en caso de
accidente, como en cabinas de baño o mesas de vidrio. - Usos con Exposición al Calor: Ideal para cocinas o fachadas que reciben
luz solar directa.
Temperbraz: Tu Aliado en la Elección Correcta
La decisión no tiene que ser complicada. Como expertos en vidrios en Panamá, en
Temperbraz te ofrecemos ambas soluciones con la más alta calidad y precisión.
Nosotros te asesoramos para que encuentres el vidrio perfecto que se adapte a tu
necesidad, presupuesto y, sobre todo, que cumpla con los estándares de seguridad que tu
proyecto merece.
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